Mantenimiento de una campana extractora

Ventilación y Extracción

No siempre se lleva a cabo el mantenimiento de la campana extractora de la cocina; esto es un error, pues eso hace que funcione mal, dejando parte del humo, olores y vapores generados dentro y expandiéndose por toda la vivienda.

Dada nuestra experiencia vendiendo estos productos, vamos a ofrecer una serie de consejos para que las campanas extractoras estén bien mantenidas y funcionando durante muchos años.

Consejos de limpieza y mantenimiento

Mantener una campana no es nada complicado y, de hecho, todo se reduce a no sobrecalentarla y a limpiarla con una cierta periodicidad, evitando que acumule demasiada suciedad.

Hay que evitar el sobrecalentamiento

Una campana está preparada para el trabajo duro, pero si no la usamos de la forma correcta se puede sobrecalentar, dañándose o perdiendo eficacia.

Por eso, uno de los primeros consejos es no encender la campana hasta que no empecemos a cocinar. A veces, se enciende nada más comenzar a preparar las comidas, por lo que si tenemos que salir en ese momento pasa mucho tiempo funcionando para nada.

Lo mejor es ponerla a funcionar justo cuando la olla o la sartén ya está en el fuego cocinando los alimentos y nunca antes.

Debemos limpiar el exterior de manera periódica

Hay personas que no saben cómo limpiar la campana de la cocina, pero lo cierto es que no puede ser más fácil. La parte exterior, que es la más accesible, la podemos limpiar con un papel después de cocinar.

Sin embargo, cuando veamos que comienza a acumular algo de suciedad, y no se la lleva el papel, tenemos que pasarle un trapo suave con detergente neutro. Con este trapo, bien escurrido, iremos haciendo movimientos horizontales hasta que notemos que el metal ya está limpio.

Los filtros acumulan la mayor parte de la suciedad

Si queremos que la campana funcione bien, los filtros deben estar limpios, puesto que, si se obstruyen, el humo, la grasa y el vapor no podrán pasar a través de ellos. Es la zona donde se acumula toda la grasa, pues su misión es retenerla para manchar lo menos posible el conducto a través del cual sale el humo, por lo que hay que quitarlos cada cierto tiempo.

No hay una periodicidad fija, puesto que el mantenimiento de la campana extractora de la cocina depende de cuánto se cocine. En el manual de la campana, viene la forma de extraerlos, y se suele hacer de una manera muy sencilla pulsando un botón que los libera de inmediato.

Se pueden lavar

Estos filtros casi siempre son lavables. Pueden estar hechos de fieltro y también de metal. En el primer caso, los lavamos a mano sin deformarlos y en el segundo los podemos meter en el lavavajillas.

Cuando los filtros metálicos tienen demasiada grasa acumulada, habrá que dejarlos en remojo un rato con un producto contra la grasa, pues de lo contrario el lavavajillas no los limpiará.

Conclusión

Llevar al día el mantenimiento de la campana extractora de la cocina es muy sencillo y es fundamental para alargar su vida útil.

Si a pesar de eso no funciona bien, lo mejor es cambiarla. En nuestra tienda, tenemos disponibles algunos extractores como el CK-25 N, el CK-60 F o el ECO-500, que se instalan dentro de las campanas y que extraen grandes cantidades de aire con el menor ruido posible.

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